«No se trata principalmente de escoger obispos buenos, malos o regulares, sino de encontrar el camino evangélico que manifieste y no oculte al Dios salvador»
«¿Qué imagen de Iglesia se percibe hoy en nuestro país? Nos empeñamos en luchar contra el laicismo y el secularismo como los grandes males. Pero, ¿estos son los grandes males?»
«Lo importante no es una lucha cultural para mantener una ideología cristiana sino por hacer presente el Reino de Dios según se manifiesta en Jesús»
Más importante que hablar de los obispos que dirigirán en los próximos años la Conferencia Episcopal, es necesario plantearnos qué Iglesia queremos ser. No se trata principalmente de escoger obispos buenos, malos o regulares, sino de encontrar el camino evangélico que manifieste y no oculte al Dios salvador.
Hemos de tener claro que la Iglesia no es un fin en sí misma, es un sacramento, un medio para acercarse al Dios de Jesús y hacer presente su Reino en el mundo. ¿Cómo debe ser su presencia en medio del mundo?
Se ha reflexionado mucho sobre las formas de estar en el mundo el conjunto de cristianos que formamos la Iglesia. O nos mezclamos y diluimos como la levadura y la sal que transforman y dan sabor o, por el contrario, intentamos crear estructuras fuertes con la intención de ir venciendo lo que consideramos un mal…Leer más (Avelino Seco, sacerdote de Santander )