Me hace falta la parte del debate, de la fundamentación, de la reflexión. El Espíritu es el protagonista, sin duda, pero no suple la responsabilidad humana de hacer juicios críticos y válidos para avanzar en cualquier dimensión humana, incluida la eclesial
Seguramente algunos participantes tendrán una postura más crítica y una voz más profética, otros serán más receptores sin demasiada audacia para dar su contribución o sin demasiado pensamiento crítico para plantear temas cruciales. No faltarán los que estarán atentos a que no salgan demasiadas divergencias para evitar debates
Falta la voluntad de hacerlo. Daría la impresión al leer estas breves referencias sobre estos temas en relación con las mujeres o que, efectivamente no se pidió en las consultas al pueblo de Dios, o se fue diluyendo en las sucesivas síntesis de los aportes
Hay una porción de Iglesia muy ajena a todo este proceso, pero también hay otra porción de Iglesia muy comprometida con este camino sinodal. Por una parte, los convocados directamente por el proceso sinodal y, por otra, todas estas redes que en su compromiso de fe y de amor a la Iglesia trabajan incansablemente por una reforma eclesial que abarque tantos aspectos urgentes, entre ellos, la inaplazable participación plena de las mujeres en ella
Estamos a puertas del inicio de la fase universal del Sínodo de la sinodalidad. Las fechas previstas son del 4 al 29 de octubre. En los días previos, los participantes, tendrán un retiro de preparación al evento. Sabemos que esta será la primera reunión porque habrá otra en octubre del próximo año. De ahí que no se pueden esperar conclusiones definitivas al final de este encuentro, pero esperamos que se avance en algunos aspectos y esto vaya afirmándose en la vida de la Iglesia. Veremos sí así es…Leer más (Consuelo Vélez)…