El Papa Francisco esta dando muestras inequívocas de ser especialmente sensible a esta dolorosa situación por la que atraviesan estos hermanos nuestros y pide para ellos una acogida cordial con la intención de que puedan sentirse como en casa, recientemente acaba de enviar un cuestionario a todos los obispos del mundo que puede servir de termómetro para el próximo Sínodo que sobre la familia se celebrará en Roma en Octubre del 2014. Así mismo el Cardenal Prefecto de la Congrgación para la doctrina de la Fe Mons. Gerhard L. Müller se ha ocupado de este asunto en un importante documento publicado por L´Oservatore Romano. Todo parece indicar que algo se está cociendo y que se siente la necesidad urgente de encontrar una vía de solución al sufrimiento que vienen padeciendo muchos católicos que se encuentran en esta situación, aunque ello suponga «repensar toda la pastoral matrimonial».